“Ciudad de sol. Alfonso Reyes y la inteligencia neolonesa (1900-1938). Tomo I”, de Alberto Enríquez Perea, fue presentado el 21 de mayo en la Capilla Alfonsina Biblioteca Universitaria.
Por: Guillermo Jaramillo Fotografía: Efraín Aldama
Las amistades son de suma importancia para lograr el mejor desarrollo de nuestros proyectos y ser retroalimentados por personas que comparten intereses comunes, como se narra en “Ciudad de sol. Alfonso Reyes y la inteligencia neolonesa”, de Alberto Enríquez Perea, presentado el 21 de mayo en la Capilla Alfonsina Biblioteca Universitaria.
“Es un repaso de la vida de Alfonso Reyes con todos los amigos de Nuevo León que conoció desde su infancia, que mantuvo correspondencia con ellos. Reyes fue una amistad muy grata, eso significa un hombre siempre leal a su palabra, amigo de todos los que conoció y después va a conocer.”, señaló.

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Es una historia intelectual, política, diplomática. Se va desarrollando desde su adolescencia, su edad en la que hay un quiebre y deja el servicio exterior y se viene a vivir definitivamente a México en 1939”.
Alberto Enríquez PereaInvestigador
De Reyes, comenta Enríquez Perea, se cuenta mucho de su amistad con personas de Nuevo León en todos los ámbitos, por ejemplo, Aarón Sáenz, quien fuera Secretario de Relaciones Exteriores.
“El libro también es una cultura del estado de Nuevo León y valdría la pena revisarlo por todo lo que estamos viendo que pasa con la cultura en México. Son personajes que vivieron por y para el país, para la cultura mexicana”, señaló.
Las cartas de Alfonso Reyes
Enríquez Perea se ha llegado a preguntar, además de las amistades que ha podido rastrear en su investigación, quiénes serían las novias de Reyes en Nuevo León.
“¿Los descendientes de esas novias no guardarán alguna carta? A veces solo se escribían las iniciales, pero no se dice quién fue. Uno piensa: ¿habrá en el cajón de los recuerdos alguna carta o algún poema de Reyes a esas novias y la familia lo conserve?”, cuestionó.

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Escribo de su estancia en el Colegio Civil. A él le interesaba la cultura, pero también amigos que no eran necesariamente de élite y que fueron sus compañeros de escuela. Conservó esas amistades toda su vida y ya después se irían incorporando otras amistades y otras se harían más fuertes”.
Alberto Enríquez Perea
Al evento asistieron estudiantes de la Preparatoria 23, a quienes Enríquez Perea aconsejó buscar amistades con personas que enriquezcan sus puntos de vista y su visión del mundo porque tan solo así podrán crecer como seres humanos.